Vivimos rodeados de un exceso de ruido sin darnos cuenta: la televisión, los teléfonos móviles, el tráfico, incluso nuestro tono al hablar... Y cómo forma parte de nuestro día a día no le damos importancia, pero este bullicio propicia el estrés, el insomnio y la ansiedad por eso es importante hacer curas de silencio...